14 febrero 2009

Trinidades apócrifas

A través de nueve cuadros de gran formato y 27 piezas que conforman polípticos y tres instalaciones, la Santísima Trinidad es representada en la muestra Tres al cubo, simbiosis del antiguo y el nuevo Perú, sus cultos y una herencia global que va desde el tabloide amarillista y Mariátegui hasta el horror nazi y el sida.

Tres al cubo es el pináculo de una iniciativa de Ángel Valdez, quien el 2001 se propuso abordar las distintas formas de representación del misterio santo; además de sus paralelos, influencias y desencuentros con los cultos de las culturas prehispánicas y el de nuestra actual sociedad.

En ese sentido se siente barroca, postmoderna, faltosa, rigurosa y muy mestiza. Sacándole la vuelta a la Escuela Cuzqueña y transformando al propio Dios - sea Padre, Hijo o Espíritu Santo - para gozo y beneficio de la muestra.

Así vemos a Jesús levitando en su dolor o preocupado porque se le hace tarde, con Stephen Hawking como Dios - pero siempre postrado en su silla de ruedas - y una paloma que ha cedido su lugar al orgulloso cóndor. Eso, sin contar a la Madre Teresa y la fila de guachimanes bomba que protege el cuadro "VIDA/PASIÓN & MUERTE".

Pero no sólo eso. Desde La estatua de la libertad y Chewbacca - importados desde Gringolandia - en "VIDA/PASIÓN & MUERTE II" hasta los chamanes, brebajes y boas de la selva, con Juaneco y su Combo incluidos, están fusionadas en esta exposición.

Gustavo Buntinx señala que la exhibición "lleva a cabo un (ab)uso político de la imagen religiosa o de culto con la intención de invertir simbólicamente la administración de lo sagrado y contrastarla con toda suerte de imágenes profanas".

Tres al cubo expone, sacude y pone de cabeza el concepto y la propia sentencia de la Santísima Trinidad. Saluda a la Virgen María y ora frente a María Magdalena, llora a las víctimas palestinas y se pregunta las sentencias de Heidegger.

Pero también abraza las alfombras, se sumerge en los retablos y se retrae con cada huaco o máscara, con cada demonio y mito, respetando la diversidad de esta tierra - a ella misma - y adentrándose en cada espejo, imagen, realidad.

La exposición podrá ser apreciada, hasta el 8 de marzo, en la Galería Germán Krüger Espantoso del Icpna (Av. Angamos Oeste 120, Miraflores) de Ma a D, de 11am. a 8pm. El INGRESO ES LIBRE y los martes 10, 17 y 24 de febrero, Valdez y Buntix realizarán visitas guiadas.

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