25 julio 2007

Detrás en la azotea

"Tal vez la muerte detrás de esa sonrisa
sea amor; un gigantesco amor
en cuyo centro ardemos"
Blanca Varela


Ahora todo parece más calmo.
Ya la ola calló tenue, casi irreverente.
Palaciegos ojos giran y guiñan un as de luz.
Se escuchan pasos y las manos bailan.

Las lechuzas gimen en medio de la pista.
Los olores crujen derrotados.
Las lágrimas emprenden retirada.

Y suenan las balas.
Allá.
Donde el llanto cobra presos.
Donde la edad corta el daño.

En la azotea de los delfines.
Donde nadie tiene sombra.
Pues la sangre ya no pinta.


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